sábado, 21 de diciembre de 2013

La escultura de Lino’o: El significado de las patas del caballo, cómo es y cómo debió ser


El pasado viernes 20 de diciembre el Partido UNACE reveló por fin el monumento que mandó construir en homenaje a su gran líder, Lino César Oviedo, quien muriera en un accidente de  helicóptero. Se trata de una escultura ecuestre con el fallecido líder, a tamaño natural y en bronce.

Según la tradición, que viene de la antigua Roma, las esculturas ecuestres guardan un significado en las patas del caballo:

Si el jinete murió por causas naturales, el caballo debe estar con las cuatro patas en el suelo. 


Si el personaje murió fuera del combate a causas de heridas adquiridas en batalla, el caballo debe alzar una pata delantera.


Si el personaje que monta el caballo murió en batalla, entonces el caballo debe estar con las dos patas delanteras en el aire.
 

Aunque en algunos casos se cumple esta regla, en la mayoría de 
los casos no, como en este, puesto que, como hemos dicho al comienzo, Lino Oviedo murió por heridas en un accidente aéreo, pero no fue posterior a ningún combate, como dice la pata de su caballo en la estatua. Más abajo mostramos cuál es la más adecuada forma de representar al extinto líder del UNACE. 



Como ya hemos dicho más arriba, según la tradición, no corresponde que el caballo de Lino Oviedo alce ninguna pata. Lo más recomendable para recordar a milicos fascistoides que intentaron hacer golpes de Estado en plena era democrática y que causaron mucho mal a mucha gente es esta: 






domingo, 29 de abril de 2012

Los pantalones

Dentro de las muchas capacidades exclusivas del hombre se pueden contar por ejemplo: la capacidad de pensar, hablar, de caminar en dos pies, de hacer música; bueno hacer música no, una vez vi en Natgeo que las ballenas también hacen música; sí, ese canto que hacen tiene las mismas características que la música que hace el hombre, según dijeron en el documental. Capaz, ellas inventaron la música vallenata (más sobre los cantos de ballenas). 

En fin; lo que quiero contarles es que la semana pasada andaba mal de salud y descubrí otra capacidad única en los seres humanos: cagarse encima. Así es, cagarse encima es capacidad exclusiva del hombre porque no hay otro animal en la Tierra que use pantalones. 

Y hablando de pantalones, ¿Cuándo se habrán inventado? 
Uno mira las películas que evocan las épocas bíblicas y ve hasta sostenes de metal pero pantalones no. Común es la imagen del centurión romano, musculoso, con pollerita y armado. 

Cómo cambia la imagen que proyecta la forma de vestir en cada época, hoy uno dice: "Musculoso, con pollerita y armado", y está describiendo a un travesti.

Pero bueno, me puse a investigar el tema del origen del pantalón y me enteré de muchas cosas. Vamos a partir del nombre: El prefijo "pan"(del griego παν) y la palabra "talón" (de otro griego llamado Aquiles), no tienen nada que ver en esto. Según Christine Bard, autora del libro "Une histoire politique du pantalon" (Una historia política del pantalón), el nombre proviene de la manera en que eran llamados los venecianos, adeptos al uso de unos calzones holgados y largos, llamados pantalone, en honor al santo venerado por esa gente, Pantaleone.

Las primeras referencias fidedignas de estas prendas proceden de hace 2600 años, en los pueblos bárbaros. Los romanos no las usaban y estaban prohibidas en Roma hasta el año 400 por considerarlas prendas propias de bárbaros, según esta revista.

Pero la historia de los pantalones recién tendría su comienzo con lo anterior; para que su uso fuese permitido a las mujeres, tuvieron que pasar muchos años y constantes luchas feministas por esa reivindicación. Hoy en día talvez los jóvenes no alcancemos a dimensionar la connotación de poder que se quiere significar con la frase "llevar los pantalones en la casa", pero lo cierto es que en su momento el pantalón significó un instrumento de lucha para movimientos socialistas y feministas (aquí está la nota completa) y que finalmente se haya logrado la reciprocidad de esta prenda de vestir para ambos sexos, obedece a muchas otras contingencias más, aparte de la lucha política. Por ejemplo, la democratización de la bicicleta a finales del siglo XIX, que hizo que las mujeres buscaran otro atuendo más cómodo a fin de montarlas (más sobre la bicicleta en la antigüedad); la influencia de las artistas que preferían vestir esas prendas, las dos guerras mundiales, que provocó que en los países se usaran pantalones por razones prácticas, etcétera. 

Lo cierto es que la aceptación total por parte de la sociedad occidental del uso del pantalón en mujeres es reciente, incluso la Iglesia Católica las veía con malos ojos.

Pero volviendo al aspecto frívolo de todo esto, enfoquémonos en los bolsillos de los pantalones. No siempre existieron los bolsillos, y no siempre estuvieron en los lugares donde hoy en día se acostumbran a ponerlos, a los costados y en las  partes de atrás. Los bolsillos hacen su aparición recién a finales de las últimas décadas del siglo XVI. Y estaban nada más y nada menos que en la parte frontal donde van las braguetas, en realidad eran bolsillos improvisados que surgieron por la necesidad de tener un lugar donde llevar pequeñas cosas (lee más sobre el origen de los bolsillos aquí).

No sé en qué momento habrán aparecido los bolsillos de la parte  posterior de los pantalones, pero tal vez es un invento de un hombre de trasero plano pero con mucho dinero, que se dio cuenta de que el primer lugar donde ponen los ojos las mujeres al mirar a los hombres es en sus nalgas, así que para cubrir el lugar de su mayor defecto decidió  crear un lugar para promocionar su mejor virtud, la billetera llena.

Hablar de pantalones siempre obliga a uno a darle un espacio especial a los pantalones vaqueros, la prenda que es utilizada por casi todo el mundo, casi sin importar la cultura a la que pertenezca. 

Los jeans nacieron en EE.UU., en la época de la fiebre del oro, a mediados del siglo XIX, cuando Levi Strauss, un inmigrante bávaro, se instaló en la ciudad de San Francisco a fin de vender los elementos necesarios a la gente que se aventuraba a esos lugares en busca de la riqueza rápida. Levi Strauss se percató de que casi todos necesitaban unos pantalones más resistentes, no se le ocurrió mejor idea que hacer unos pantalones de las telas que eran utilizadas para toldos de las carretas y usadas para carpas (de la misma tela se hacían los velas de los barcos, fabricadas de las fibras del Cáñamo, una variedad de Cannabis) y así nacieron los primeros jeans (Levi's). La palabra "jeans" deriva del gentilicio del lugar de donde se importaban las telas para su fabricación, geneose.

Determinar el camino que tomó el pantalón para llegar a imponerse a las faldas en la vestimenta de los hombres, y las causas de eso, es un tema que tal vez solo un erudito lo pueda exponer. Lo cierto es que mientras ya las mujeres conquistaron el pantalón y lo hicieron recíproco para ambos géneros, la tendencia de la moda quiere hacer lo mismo en los hombres en cuanto a las faldas (más aquí). No nos extrañe que en unas décadas más leamos algo como esto pero sobre las faldas.

Antes del punto final:

¿Sabías que los pantalones vaquero solo necesitan ser lavados una vez al mes?
¿Sabías que Levi's aún sigue usando cierto porcentaje de la tela de cáñamo para fabricar algunas de sus prendas?


                                



                                                                 "Nunca lleves tus mejores pantalones cuando salgas a luchar por la paz y la libertad"
                                                                            Henrik Johan Ibsen.                                                         







miércoles, 21 de marzo de 2012

Nueve mitos increíbles en los que hay gente que cree

Entre la mayoría de personas con mentalidad rural, que conforman los habitantes de esta tierra llamada Paraguay, es muy común encontrar a personas mayores -y hasta a jóvenes- que creen en cosas que no tienen fundamento lógico alguno. 

A continuación expondremos nueve mitos (no encontramos uno más, lo suficientemente estúpido para completar diez, además, es más original así), ridículos en casi todos los casos. Algunos parecen deber su existencia a una salida que nuestros abuelos tuvieron para evitar que sus hijos hicieran algo que aquellos no querían, y terminaron convirtiéndose en una costumbre popular. La mayoría parecen ser la rebuscada explicación para algo que no se comprende.

9- Cruzar los dedos para que el perro no se vaya de cuerpo: Enlazar los dedos como si fueran eslabones de una cadena y estirarlos, era la manera en que uno se divertía cuando era niño, viendo cómo los perros se esforzaban tratando de deponer. La cosa dejaba de ser divertida cuando uno se daba cuenta de que eso en realidad no funcionaba y debía limpiar todo lo hecho por el perro.










8- Poner la escoba al revés detrás de la puerta para espantar visitas no deseadas: Tal vez este mito sea de herencia española y debe ser el más conocido entre todos los de esta tanda. Pero para quienes no saben, lo explicamos: poner una escoba, dejando la punta del mango hacia el piso, según la creencia popular, causa que las visitas que deseamos que ya se vayan de casa, lo hagan. Así que de ahora en más vean bien tras la puerta al salir de la casa visitada, si no hay ninguna escoba al revés, fueron agradables visitas.








7- Si te canta el Pitogüé, estás embarazada: Tal vez muchas chicas se hayan quedado preocupadas cuando, mientras tomaban terere al aire libre, oyeron el canto del Pitogüé, pues según la creencia (heredada de los guaraníes) este pájaro de cabeza negra, con una franja blanca en el medio, de alas grisáceas y pecho amarillo; trae con su dulce canto el aviso de que una de las mujeres de la casa está en la dulce espera. Laboriosa tarea la de estos pájaros en el pasado, hoy en día disminuida; puesto que, la cantidad de hijos por mujer en el Paraguay cayó del 3,2  (según el censo de 1992), al 2,7 hijos por mujer, hoy en día; según datos de la Dirección de Estadísticas Sociales  y Demográficas.







6- Orinar lo más rápido posible luego de haber tenido una relación de riesgo: El mito no es nada común, pero lo escuché una vez, se refiere a que si uno tiene una relación sexual de riesgo, lo que debe hacer al instante es orinar para que "limpie todas las posibles impurezas" que se pudiesen haber adquirido a causa de la relación. Según la página del Programa de las Naciones Unidas Para el Desarrollo (PNUD), cada día hay dos nuevos infectados con VIH en Paraguay; luego de conocer este mito, que no nos extrañe.





5- Llevar un pedazo de hierba en una de las partes laterales del abdomen para retrasar el cansancio: Quién de los que hemos estado en las inferiores de algún club, o de los que simplemente jugamos "partido a plata" en el barrio, no habremos visto por lo menos una vez a algún compañero o miembro del equipo contrario -que generalmente era alguien venido del interior- buscando el famoso yuyo "typycha korartu", a fin de ponérselo entre el short de fútbol, en uno de los costados del abdomen; según ellos, para "tener más rendimiento físico en la cancha".




4- "Así dijo fulano y más tarde murió (o le pasó algo malo)": Este debe ser el más universal de esta tanda de mitos; la frase generalmente viene de parte de gente muy crédula en cosas del destino, o en un ser omnipotente dueño de las riendas de todo lo que sucede, que está pendiente de lo que uno diga para mandarle un castigo si dice algo inapropiado. Por ejemplo, una vez alguien se expresó así: "Niezstche dijo que 'Dios ha muerto' y se quedó loco".






3- Las botellas vacías volcadas emborrachan más rápido: Esta debe ser la creencia popular más nueva; resumiendo: preconiza mantener caídas las botellas de cerveza que se van vaciando a medida que se toman. Por más que uno trate de encontrar el nexo entre la ebriedad producida a mayor rapidez con una botella vacía que está volcada en el suelo, nunca la encontrará por la vía de la lógica, pero como se sabe, eso no es necesario para el conocimiento vulgar...



2- No cortarse el pelo con una mujer: A lo largo de la historia, la menarca de la mujer fue sujeto de numerosos mitos, uno más ridículo que otro, todos sin fundamento, como todo mito. Así por ejemplo, en su Historia natural, dice Plinio: "La mujer que está en período de menstruación  arruina las cosechas, devasta los huertos, mata las semillas, hace caer los frutos, mata las abejas; si toca el vino, lo convierte en vinagre; la leche se agría...". Es increíble que este tipo de creencias sobrevivan hasta nuestros días. La versión paraguaya es que no se debe cortar el pelo con una mujer, puesto que se corre el riesgo de que ella esté con la regla, lo que produce que se caigan todos los pelos y que uno quede calvo.





1- "Te va a soplar viento": Esta frase es muy común escucharla de boca de las abuelas o algún adulto, si uno imita alguna forma de caminar grotesca o hace alguna mueca que deforme el rostro, o simplemente imite algo con el cuerpo, supuestamente se corre el riesgo de que el viento le sople a uno y el cuerpo quede para siempre así.


Ya quisieran muchos adultos que esta creencia sea verdad para que una parte del cuerpo quede para siempre de una determinada manera luego de tomar  la pastilla azul y tras recibir un simple soplo...